Monstruos perfectos
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Vivimos dentro de la atención ajena. Nos volvemos hacia ella como flores hacia el sol.
Vivimos dentro de la atención ajena. Nos volvemos hacia ella como flores hacia el sol.
La vida desprecia el conocimiento; le obliga a esperar sentado en la antesala, a esperar fuera. Pasión, energía, mentiras: eso es lo que la vida admira.